De acuerdo con los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística sobre el Índice de Precios al Consumo (IPC) del mes de mayo , la tasa de variación anual del IPC se situó en el -1,0%, una décima por encima de la tasa registrada en abril.
La tasa de variación anual de la inflación subyacente (sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) se mantiene en el 0,7%, casi dos puntos por encima que la del IPC general.
Por sectores, los grupos con mayor influencia en este aumento de la tasa anual son:
Vestido y calzado, con una tasa del 2,6%, que recoge el comportamiento de los precios en la temporada de primavera-verano.
Alimentos y bebidas no alcohólicas, con una tasa del 0,3%. Destaca en esta evolución el incremento de los precios de las frutas frescas. Cabe reseñar también, aunque en sentido contrario, la bajada de los precios de las legumbres y hortalizas frescas y el pescado fresco.
Vivienda, que refleja una variación del 0,2%, causada por las subidas de los precios de la electricidad y el gasóleo para calefacción, compensadas en parte por la bajada de los precios del gas.
Hoteles, cafés y restaurantes, que presenta una variación del 0,2%, principalmente, por la subida de los precios de los hoteles y otros alojamientos.
Por su parte, los grupos con mayor influencia negativa son:
Ocio y cultura, con una tasa del –0,2% fundamentalmente, por descenso de los precios del viaje organizado.